Historia:
A principios de 1998 tuvo lugar el primer encuentro entre la señora Lisette Voisine, empresaria en diseño de modas y el señor Luc Bouchard, empresario independiente en el campo del transporte de carretera especializado. Llegaron al tema de la química hasta el punto de lograr una sinergia que les permitió emprender un desafío de calibre mundial: hacer del amianto un elemento seguro.
Durante el invierno de 2001, se comienza de manera progresiva la búsqueda de informaciones y de proveedores de servicios relacionados con este tipo de proyectos como lo son las firmas especializadas en derechos de propiedad intelectual y las diversas estructuras de financiamiento.
Acto seguido, se preparan los diseños de los equipos y se hacen fabricar de manera personalizada con el fin de consolidar el concepto.
Se elaboraron, entre otros, dos habitáculos de trabajo portátiles, herméticos y transparentes según las exigencias requeridas para trabajar en este complejo desafío de manera segura sin contaminar el medio ambiente. Las dos etapas de ensayo tuvieron su propia función, la primera fue tomar muestras de aire con materia contaminada mientras que la otra unidad consistió en tomar parcelas del muestreo de aire de partículas de amianto tratado con el procedimiento térmico. Así, los diferentes procedimientos permitieron controlar definitivamente la volatilidad que anteriormente hacía del amianto un elemento nocivo.
Una firma especializada de Montreal, reconocida por analizar muestras de aire y minerales llevó a cabo la comparación de los resultados concluyendo que el crisotilo conservó efectivamente todas sus ventajas y propiedades. Por tanto, el resultado es indiscutiblemente un éxito.
Desafortunadamente la señora Voisine murió debido a un cáncer de seno en enero de 2006, fecha después de la cual el señor Luc Bouchard dirige él solo este proyecto de gran envergadura que sigue tomando fuerza.
|
